El Capitán Starfunkel abandonó la Tierra en un cohete hecho de papel y cinta adhesiva, iba en busca de un planeta alejado del sistema solar del que casi sin querer descubrió su existencia al escudriñar con su telescopio de cartón el cielo estrellado de una noche en la costa argentina. Los mensajes que nos conectan son su bitácora, escrita en papel de colores, arrojados al espacio en botellitas de refresco. Iremos tras sus pasos, ya que nosotros mismos siempre buscaremos ese lugar llamado Utopía.
ESTABA AHI
Estaba ahí, lo ví. Tenía la sonrisa que olvidé, la vitalidad que me abandonó y la alegría de no saber lo que vendría. El final de la vida tiene estas vueltas, solo sé que todo valió la pena.