AHORA

En un mundo estéril, Mark ingresó a su transporte, una voz cibernética le saludó —buenas tardes doc., tercer salto, a cuándo nos dirigimos hoy?.

Con un dejo de tristeza Mark dictó exactamente la fecha en que había viajado por primera vez. 

Los científicos expectantes, aguardando el momento indicado abrieron la escotilla. La cápsula había perdido todo el aire, Mark yacía inmóvil sobre el computador inservible, él sostenía aún en una de sus manos, una fotografía de la devastación con una inscripción, en ella podía leerse "ahora el futuro estará a salvo". .